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Cuando uno avanza en esta vida, se va dando quién te aprecia de verdad. Muchas personas te dirán las mismas palabras o frases de cariño o de admiración, pero pocas se quedarán a lado tuyo cuando necesiten llorar o un simple abrazo.

Este es el detalle importante. Uno de muchos. Las sonrisas son iguales y las locuras semejantes, pero tan sólo una persona o quizá 3 sacrifique que le guste por hacerte sentir bien como el dejar de fumar porque te hace daño o servirte agua porque el café te hace mal. 

Las verdaderas amistades y amores no están por un momento. Siempre hay un interés por verte sonreir y de acercarse a saber porqué cambias de actitud sorpresivamente.

Nunca esperes demasiado de alguien. Si quieres conseguir o ser alguién, trata de cumplir una pequeña meta por día. La pereza es enemiga.

Si quiere tomar las riendas de tu vida hacia otro rumbo,  reflexiona sobre en qué debes ser prevenido esta nueva oportunidad que te das. No hay culpables. No hay gente mala. Hay mucha gente egoísta e interesada por sacar provecho de tí o de hablar mal de lo que eres.

Esta vida que caminas tan sólo tiene sorpresas para tí. Nada es suficiente malo para decir que se ha perdido todo. Mientras tengas vida, haz el bien aunque esa mala amistad te traicione. Es decir, dar un paso al costado y seguir la ruta que te haz propuesto caminar.

Un abrazo, un beso en la mejilla o en la frente, una pregunta ¿cómo estas?; no son solo ello. Es el abrir una puerta para reposar de tranquilidad cuando todo falle. Un pequeña prueba de cordialidad cuando no lo pides o quizás cuand estés tan mal que no quieras ver a nadie.

Ten cuidado. Nadie es bueno ni completamente malo. Con el tiempo, sabrás quién es la persona que te hace sonreir apesar de tener mucha carga en la espalda.

Disfrutar el día como la noche con lo bueno y lo malo...la vida.